Barcelona Capital Mundial de la Arquitectura 2026.
Barcelona competía con Pekín para conseguir la Capital Mundial de la Arquitectura 2026 con un presupuesto modesto frente a la ambiciosa candidatura China.
La estrategia de Barcelona no se centró en competir en magnitud, sino en destacar su esencia única: una ciudad mediterránea diseñada para las personas, que combina creatividad, accesibilidad y sostenibilidad. La narrativa de la candidatura apeló a la empatía de las delegaciones internacionales con un enfoque emocional y cercano. Más allá de su legado icónico, Barcelona se presentó como una ciudad a escala humana, vibrante, acogedora y comprometida con un futuro sostenible. El tipo de lugar que cualquier miembro del jurado soñaría visitar.
Barcelona fue seleccionada, consolidando su posición como referente de vanguardia a nivel internacional en diseño y sostenibilidad y captando un evento dinamizador para la economía, el turismo e innovación de la ciudad.